viernes, julio 25

Al horno con papas

La verdad que, le haya salido mal o no, en mi vida lo vi a Gisborne tan contento. Parecía que era Navidad y que le habían regalado una Wii.

Me ataron las extremidades, me pusieron una capucha tapándome la cabeza, me patearon un rato y me terminaron tirando en una mazmorra en lo de Gisborne, soltando una risa malvada cuando cerraron la puerta con llave. ¿Vieron que los malos cuando te encierran se empiezan a reír malévolamente? Es un hábito que tienen.

Estaba todo oscuro y la celda tenía un olor a mierda terrible. Hacía frío.

Seguramente iban a anunciar mi captura y al día siguiente me colgarían adelante de todo Sherwood, para demostrar que supuestamente con el rey Juan no se jode.

Ya está, pensé. Hasta acá llegamos.

Mariana. Fue lo primero que me vino a la mente. En la nebulosa quedaron los Alegres y la misión; yo sólo añoré, por unos instantes, los dorados cabellos de mi amada, y el calor de sus manos. Lo único que puede salvarme, pensé, es el amor de Mariana.

Y en esas cosas mi mente cavilaba, tendido yo en el piso frío de piedra, ciego por las vendas que cubrían mis ojos; cuando escuché una tos casi imperceptible.

5 comentarios:

Christian dijo...

¡¡¡Es el conde de Montacristooo!!! La trama se complica, ya sabía. O es el conde o una rata muy grande tipo cocker.

Dark Knight dijo...

Espero que sea la rata, seria mas cómico.
adoro este blog.

juezcarlos dijo...

robin, no la hagas larga, quien era? Tractorcito Cabrera ?

Anónimo dijo...

que al dopi q estan

Wylt dijo...

Era Jafar que lo envia a buscar por un pasaje secreto la lampara magica!! no??